Por
Javier Mitchell
Poco
después de establecerse la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas en
1927, se celebró una cena en la Sala Crystal del Hotel Biltmore, en el centro
de Los Angeles, para discutir las metas de la nueva organización. Una de esas
metas era idear un método que honrara los logros extraordinarios, fomentando
así los niveles de calidad superiores en todas las facetas de la producción
cinematográfica.
Cedric Gibbons
En una de
las varias juntas de las siguientes semanas, el director de arte de MGM, Cedric
Gibbons bosquejó la estatuilla de un caballero empuñando una espada, de pie
frente a un rollo de película. Los cinco radios de la película representaban
las cinco ramas originales de la Academia – actores, directores, productores,
técnicos y escritores – y la espada simbolizaba protección para el bienestar y
avance de la industria. El diseño fue adoptado de inmediato por la Junta
Directiva y engalanó la portada de la edición de noviembre de 1927 de la
revista de la Academia. A principios de 1928, Gibbons eligió al escultor George
Stanley de Los Angeles para darle forma tridimensional a su diseño.
Juntos
dialogaron del concepto del diseño – no se usaron modelos ni bosquejos en vivo
– y Stanley produjo varias versiones entre las que Gibbons eligió una. En el
diseño final se perfiló la figura del caballero y el rollo de película terminó
bajo sus pies. Así nació la hoy famosa estatuilla.
Banquete de 1929
Desde el
banquete inicial de los premios realizado el 16 de mayo de 1929, en el Salón
Blossom del Hotel Roosevelt en Hollywood, se han entregado casi 3,000
estatuillas. Cada enero, se funden, moldean, pulen y lustran nuevas estatuillas
doradas adicionales por la R.S. Owens & Company, la compañía especialista
en premios, con instalaciones en Chicago, que la Academia conserva desde 1982.
La estatuilla
tiene 13 ½ pulgadas de altura y pesa 8 ½ libras. El diseño de la estatuilla
nunca ha cambiado desde su concepción original, pero el tamaño de la base ha
variado, hasta el año 1945 en que se adoptó su forma actual. Su nombre oficial
es Premio de la Academia al Mérito (Academy Award® of Merit), pero la
estatuilla es más conocida por su apodo, Oscar, cuyo origen no es claro. Una
historia popular cuenta que la bibliotecaria y eventual directora ejecutiva de
la Academia, Margaret Herrick, pensó que la estatuilla se parecía a su tío
Oscar y así lo dijo, y a partir de ese momento, los miembros de la Academia
comenzaron a llamarla Oscar®. De cualquier forma, para la sexta presentación de
los Premios de la Academia en 1934, el columnista de Hollywood, Sidney Skolsky,
utilizó este nombre en su columna cuando se refería a la primera ganadora a
Mejor Actríz, Katharine Hepburn. La Academia en sí no utilizó este apodo de
manera oficial hasta el año 1939.
El Premio
Al Mejor Actor / Actríz de Reparto fue creado en 1937. Los ganadores
recibieron, en lugar del Oscar, esta plaqueta de la Academy Awards por siete años,
desde 1937 a 1943
Las 15
estatuillas presentadas en la ceremonia eran de bronce sólido enchapadas en
oro. En pocos años, el bronce fue remplazado por el metal britannia, una
aleación parecida al peltre, que facilitó el alisado de su terminación. Debido
a la escasez de metales durante la Segunda Guerra Mundial, los Oscars® fueron
fabricados con yeso pintado durante tres años. Cuando finalizó la guerra, todas
las figuras de yeso premiadas anteriormente fueron cambiadas por las de metal
enchapado en oro.
El 22 de
febrero de 2015, se honrarán los logros de hasta 24 categorías regulares en la 87ª
presentación de los Oscars® en el teatro Dolby en el Hollywood & Highland
Center®. Sin embargo, la academia no sabrá realmente cuántas estatuillas se entregarán
hasta que se abran los sobres en la Noche de los Oscars®. Aunque antes de la
ceremonia se conozcan la cantidad de categorías, la posibilidad de empates y de
que múltiples artistas compartan el premio en algunas categorías hace que el
número exacto de estatuillas Oscar a entregar sea impredecible. Como en años
anteriores, las estatuillas excedentes serán alojadas en la bóveda de la
Academia hasta el evento del próximo año.
Excepto en
los años en los que la Academia creó un evento publicitario con el envío de los
Oscar® desde Chicago hasta Los Angeles, habitualmente se enviaban por tierra a
través de empresas de transporte común. Sin embargo, en el año 2000, sólo a
pocas semanas de la fecha de presentación, el cargamento de Oscars® de ese año
fue robado del muelle de carga del transportista. Fueron recuperados una semana
más tarde, pero no antes de producir una ansiedad extrema durante aquellos
días. Desde ese entonces, la Academia mantiene a la mano estatuillas de reserva
para un programa completo.
La
estatuilla Oscar® es el premio de mayor reconocimiento mundial. Su éxito, como
símbolo del logro cinematográfico, sin duda sorprendería a aquellos que
asistieron a aquella cena, hace más de 80 años, como también a su diseñador,
Cedric Gibbons. Actualmente, como lo viene haciendo desde 1929, se mantiene
erguido sin paralelo, en las repisas de los más grandes cineastas de la
historia.